19 Calaveritas Literarias Cortas: Humor y Tradición en Verso
Las calaveritas literarias son una forma creativa y divertida de recordar a la muerte con respeto y picardía. Estas composiciones cortas llenas de rima y humor negro forman parte de las celebraciones del Día de Muertos en México. En esta ocasión, te compartimos 19 calaveritas literarias cortas, ideales para compartir, reír y reflexionar sobre el inevitable destino que todos compartimos.
- 1. La Muerte en la Escuela
- 2. La Muerte en el Mercado
- 3. La Catrina y el Doctor
- 4. El Panadero y la Catrina
- 5. La Muerte en el Cine
- 6. La Maestra y la Muerte
- 7. El Mecánico y la Flaca
- 8. La Muerte en la Oficina
- 9. El Bombero y la Calaca
- 10. El Chef y la Muerte
- 11. El Político y la Calavera
- 12. La Muerte y el Jardinero
- 13. La Estudiante y la Catrina
- 14. El Músico y la Muerte
- 15. La Muerte en el Supermercado
- 16. El Poeta y la Catrina
- 17. La Muerte en la Universidad
- 18. El Albañil y la Muerte
- 19. La Muerte y el Barbero
1. La Muerte en la Escuela
La Muerte a la escuela llegó,
y a todos los profes se llevó,
pero no pudo con Juan,
que siempre se hacía el galán.
2. La Muerte en el Mercado
En el mercado andaba la Muerte,
buscando un alma con suerte,
pero nadie la reconoció,
¡y hasta fruta le vendió!
3. La Catrina y el Doctor
Al doctor la calaca llegó,
y con su bisturí se lo llevó,
pero el médico no se rindió,
y hasta un chequeo le ofreció.
4. El Panadero y la Catrina
El panadero amasaba con amor,
cuando llegó la calaca con fervor.
Le pidió un bolillo bien hecho,
pero al horno se fue derecho.
5. La Muerte en el Cine
En el cine la muerte andaba,
entre palomitas se paseaba.
Quiso ver una función,
¡y terminó siendo la atracción!
6. La Maestra y la Muerte
La maestra a su clase entró,
y a la Catrina sorprendió.
"Vente maestra", le dijo la huesuda,
"que en el panteón serás mi alumna."
7. El Mecánico y la Flaca
El mecánico en su taller sudaba,
cuando la flaca lo observaba.
"Vente ya", le dijo la calaca,
"que el motor del panteón te llama."
8. La Muerte en la Oficina
La calaca en la oficina apareció,
y a todos los empleados sorprendió.
"Ya dejen de trabajar", les gritó,
"que el descanso eterno llegó."
9. El Bombero y la Calaca
El bombero apagaba el fuego sin fin,
cuando la muerte lo hizo venir.
"Vente conmigo, valiente señor,
que en el panteón serás mi salvador."
10. El Chef y la Muerte
El chef cocinaba un gran banquete,
cuando la calaca le hizo un retrete.
"Vente conmigo, cocinero fiel,
que en el panteón serás mi pastel."
11. El Político y la Calavera
El político en su despacho descansaba,
cuando la calaca lo observaba.
"Vente conmigo, gran líder,
que tu campaña ya no puede seguir."
12. La Muerte y el Jardinero
El jardinero plantaba una flor,
cuando la huesuda lo vio con amor.
"Vente conmigo, cuidador de la tierra,
que en el panteón serás mi hierba."
13. La Estudiante y la Catrina
La estudiante libros leía,
y la Catrina la veía.
"Deja esos libros ya,
que al inframundo te irás."
14. El Músico y la Muerte
El músico su guitarra tocaba,
cuando la calaca lo escuchaba.
"Vente conmigo, cantador,
que en el panteón serás trovador."
15. La Muerte en el Supermercado
En el súper andaba la flaca,
buscando una buena resaca.
"Vente ya, cajero querido,
que en el panteón no hay más ruido."
16. El Poeta y la Catrina
El poeta versos escribía,
y la Muerte lo leía.
"Vente ya conmigo, buen rimador,
que en el panteón serás escritor."
17. La Muerte en la Universidad
En la universidad llegó la huesuda,
buscando algún alumno en duda.
"Vente conmigo, sabio estudiante,
que en el panteón serás mi ayudante."
18. El Albañil y la Muerte
El albañil su muro levantaba,
cuando la Muerte lo miraba.
"Vente ya, gran constructor,
que en el panteón serás arquitecto mayor."
19. La Muerte y el Barbero
El barbero cortaba el cabello feliz,
cuando la calaca le pidió un bis.
"Vente conmigo, estilista fiel,
que en el panteón harás mi riel."
Conclusión
Estas calaveritas literarias cortas son una forma divertida de honrar a las personas que encontramos en nuestra vida cotidiana. Con humor y un toque de picardía, recordamos que la Muerte, aunque inevitable, puede ser recibida con una sonrisa y unos versos juguetones. ¡Las calaveritas son una excelente manera de mantener vivas nuestras tradiciones mientras reímos y reflexionamos sobre la vida!
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